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San Martín: El autor 2012 ISBN 978-887-33-0957-4 CCD B863

martes, 25 de marzo de 2014



Un decir de la vida

¿Quien sabe como se puede dejar de respirar y acercarse a lo que toca en la alegría sin mediar con la sonrisa?



¿Quien sabe como es el canto de las hojas que caen y pueden sobrevolar al fondo de lo bello?


  
Un decir de la vida
que te inunda,
va esparciendo
en la densidad del aire,
ese vapor que despilfarra feromonas.

 





Un surco en el éter
que arrastra los sueños,
es solo para saborear
en aquel territorio,
el perfume de lo agreste.

 


Un murmullo de olas
que despierta en la luz,
es solo para contagiar
la minúscula sorpresa
de la ingenua incandescencia.





Un poema que dibuja la ternura
tiene tu rostro encendido,
y es solo para llevar al tacto
la forma de tus labios,
e imaginar en que lugar
se encuentra lo sublime.


De todos los fuegos…







Agradecemos la colaboración de Elizabeth_oro por la creación de este video, su musicalización, enunciado de texto y montaje de imágenes.




No te enamores de una mujer que lee, de una mujer que siente demasiado, de una mujer que escribe...
No te enamores de una mujer culta, maga, delirante, loca.         
No te enamores de una mujer que piensa, que sabe lo que sabe y además sabe volar, una mujer segura de si misma.
No te enamores de una mujer que se ríe o llora haciendo el amor, que sabe convertir en espíritu su carne, y mucho menos de una que ame la poesía (esas son las más peligrosas), o que se quede media hora contemplando una pintura y no sepa vivir sin la música.
No te enamores de una mujer a la que le interese la política y que sea rebelde y vertigue un inmenso horror por las injusticias. Una a la que le gusten los juegos de fútbol y de pelota, y no le guste para nada ver televisión. Ni de una mujer que es bella, sin importar las características de su cara y de su cuerpo.
No te enamores de una mujer intensa, lúdica y lúcida e irreverente.
No quieras enamorarte de una mujer así.
Porque cuando te enamoras de una mujer como esa, se quede ella contigo o no, te ame ella o no, de ella, de una mujer así, JAMAS se regresa.

                                              Martha Rivera Garrido